
Juntarse Para Los Festejos
Las fiestas de fin de año han devenido en una construcción social donde se espera que la familia esté unida en armonía y amorosidad. Se ha creado la expectativa de que en esas fechas podemos aunarnos a todos
Te dejo una recopilación de algunos de los artículos publicados en formato gráfico y digital sobre mis viajes, psicología y astrología.
Las fiestas de fin de año han devenido en una construcción social donde se espera que la familia esté unida en armonía y amorosidad. Se ha creado la expectativa de que en esas fechas podemos aunarnos a todos
No estamos solos si nos gusta la persona que tenemos al lado. ¿De quiénes nos rodeamos? ¿Qué nos une? ¿Cómo nos sentimos ante la mirada del otro? ¿Nos llevan al pasado o perciben nuestros cambios?
Algunas personas se defienden diciendo que no son negativas sino realistas. Desde su punto de vista es cierto porque sus palabras son una profecía auto cumplida. Al esperar lo peor, evitan tratar, se rinden antes y no alcanzan resultados positivos.
Los chicos están expuestos a mayor información y creen que saben más que los adultos. Pero confunden información con el conocimiento y la experiencia que solo el paso del tiempo le brinda a una persona.
Desde el punto de vista médico, el narcisismo es un trastorno de la personalidad que se mide dentro de un espectro. La mayoría de nosotros tenemos un grado de narcisismo pero pocos el trastorno severo, la punta más extrema del espectro.
Cuando somos chicos nuestros padres nos parecen perfectos. En la vida adulta descubrimos que son humanos con defectos y virtudes. ¿Cómo elaborar ese "duelo" entre el padre perfecto que soñamos y el real que tenemos?
Es importante dedicar tiempo a la familia, la pareja y los amigos. No obstante, lo urgente tapa lo importante y ellos suelen quedar en segundo plano.
Durante la niñez, el cerebro es una esponja que absorbe muchísima información. Es la etapa donde más desarrollo neuronal se produce. Si estimulamos a los hijos
Con el paso de los años, valoramos cada vez más nuestro tiempo. Aprendemos a decir que NO a encuentros que ya no nos nutren o donde sabemos que no conectaremos en profundidad con nadie.